Durante el embarazo el cuerpo experimentas varios cambios y los ojos, no son una excepción.

A causa de las alteraciones hormonales existen cambios en la salud de nuestros ojos que hay que tener en cuenta al igual que se tiene en cuenta y se cuida otros aspectos como pueden ser la piel y la nutrición.

Sequedad ocular.

Ya hemos estado hablando de esta molestia en otras ocasiones, y durante la gestación la calidad así como la cantidad de la lagrima ocular puede verse alterado, que detectamos por pequeñas incomodidades como: sensación de quemazón, picor e, incluso, un lagrimeo constante. Como siempre hemos comentado, para aliviar estos pequeños problemas hay que usar las lagrimas artificiales, y sí es muy continuo, acudir al especialista.

Miopía ¿Aumenta?

Puede verse afectada, sobre todo a partir de la semana 32 de gestación. Es por culpa de la retención de líquidos que afecta a la cornea y cristalino. Hay que evitar, si existen problema de visión, realizar tareas como la conducción nocturna y revisar la vista si afecta más a la vida cotidiana. De todas maneras, los especialista informa que en la mayor parte de los casos la vista se recupera a las pocas semanas de dar a luz.

Aún así, no todo es malo. En el caso de glaucoma, la presión desciende. Y con enfermedades como la uveítis suele mejorar, gracias al aumento de los niveles de corticoides de la embarazadas y que actúan como antiinflamatorios naturales.