Las lentes de fantasía proporcionan un toque perfecto a los disfraces y looks más creativos. Cuando se acercan celebraciones como Halloween o el Carnaval, este tipo de lentes hacen su aparición de forma ilegal en bazares, centros de belleza y otros establecimientos no autorizados, donde no existe ningún tipo de control ni garantía de seguridad.

Estas resultan fácilmente asequibles y en especial en las compras online, centros de belleza, bazares y otros establecimientos no autorizados, en los cuales no existe ninguna garantía sanitaria.

Además, cada ojo es diferente y no existe una lente estándar que se ajuste perfectamente a todas las personas. Cuando se adapta una lente de contacto, el óptico-optometrista hace un análisis de todos los aspectos, el estado del ojo, medida de la córnea, salud ocular del paciente y realiza un seguimiento periódico del proceso de adaptación. También enseñamos las pautas de manipulación, limpieza y desinfección esenciales para minimizar cualquier posible riesgo con la salud ocular, así como las horas de uso recomendadas y la frecuencia de reemplazo de las lentes.

Si se usan este tipo de lentes, podemos experimentar síntomas como sensación de sequedad y arenilla en los ojos, enrojecimiento, irritación e incluso dolor al retirar la lente. Otros riesgos con el uso inadecuado de este tipo de lentes son conjuntivitis, inflamación corneal, reacciones alérgicas, abrasión corneal e incluso pérdida visual.

Algunos estudios han constatado que los usuarios de lentes de contacto que no las compran en un establecimiento sanitario de óptica tienden a no respetar las pautas de mantenimiento e higiene necesarias para disminuir el riesgo de lesiones corneales e infecciones oculares, ya que no han contado con la labor educativa previa que realiza el óptico-optometrista.

Las claves para el uso correcto de las lentes serían:

1. Realizar una adaptación personalizada de las lentes de contacto, ya que ni todos los ojos son iguales ni todas las lentes tienen las mismas medidas.
2. Las lentes no son un juguete, y por ello no se deberían adquirir en bazares, mercadillos u otros puntos de venta no autorizados.
3. Es aconsejable lavarse y secarse bien las manos antes de manipularlas. Limpia las lentes de contacto de manera cuidadosa y con regularidad, siguiendo las indicaciones específicas de tu óptico-optometrista.
4. Para conservar las lentes se deben guardar siempre en un portalentes y utilizar únicamente las soluciones de mantenimiento prescritas por el óptico-optometrista.
5. No debes usar las lentes más horas de lo recomendado o más allá de la fecha en que haya que desecharlas. Tampoco se debe dormir con ellas.